Segunda oportunidad, ¿estás seguro que quieres saberlo?
Piensatelo,
¿seguro?
1…
2…
3…
Ya no hay vuelta atrás
Saber cuál es el futuro de una persona es tremendamente sencillo.
Me hace falta tan solo hacerte una simple pregunta para saber cómo va a ser tu futuro.
Es una pregunta tan sencilla que si la conocieras podrías saber cuál es el futuro de tu hijo. De hecho, como tú le conoces, no te haría ni falta que te contestase.
Mira si es potente que el año pasado trabajando en un instituto los chavales me conocían por Vicent El Mentalista. Fue muy divertido, entré en el aula, al principio empezamos como siempre intentado ser ellos quienes llevan las riendas de la sesión, preguntando, cuestionando y haciendo bromas…
Si me has visto hablar en público tienes claro lo rápido que le di la vuelta a la situación. En ese momento, les hice la pregunta y se hizo el silencio.
25 adolescentes en completo silencio, sintiendo la tensión de saber que están delante de una persona que puede leerles como un libro abierto.
Sintiendo además el peso de la verdad, de la evidencia, porque cuando escuchas algo que es cierto solo puedes o alterarte o callarte, no hay termino medio.
Saber cuál va a ser tu futuro no te deja indiferente. O te gusta o te inquieta pero no puedes hacer como que no lo sabes. Porque si no haces nada para cambiarlo estás condenado a que se haga realidad.
Es fácil, muy fácil saber cuál va a ser el futuro de tu hijo.
Así, sin saber cuál es la pregunta, tú ¿qué dirías? ¿cómo será su futuro?
Estoy seguro que sientes una gran contradicción. Porque por un lado quieres poder pensar que será un buen futuro, que será exitoso, que será feliz, hasta el punto de que te autoengañas diciendo que no hay de qué preocuparse, que es cosa de la edad, que ya se le pasará…
Pero por otro lado algo te dice que no será así, pero haces el avestruz, escondiendo la cabeza confiando que pase el peligro.
No hay más ciego que el que no quiere ver.
Te voy a dar la pregunta, pero te aviso que si no quieres darte cuenta de lo que tienes en casa, no lo vas a ver, por muy evidente que sea.
Preparado…
Dime cuáles son sus hábitos y te diré qué vida le espera.
Si hace deporte todos los días…
Si lee todos los días…
Si estudia todos los días…
Si juega al ordenador todos los días…
Si se pasa horas delante de la pantalla todos los días…
Si come comida basura todos los días…
Si no se relacionas con su familia todos los días…
No apartes la mirada y date cuenta.
Esa es la vida que le espera.
A no ser qué hagas cosas diferentes, a no ser que aprendas a ayudar a tu hijo. Está en tu mano poder ayudarle si sabes cómo.
Para ello he organizado un Espectáculo Formativo.