Podres y Modres

Seamos coherentes, el 95% de las personas que me leéis sois mujeres. 

Si eres un hombre, cambia la “m” por la “p” y te debo una copa de vino, por tu humildad de querer mejorar. 

Existen los Adolescentes y los Odolescetes.

Tal cual.

Se nota a la legua cuál es cuál. 

Los Adolescentes son esos hijos responsables, confiables, motivados, comprometidos, amables y felices.

Los Odolescentes son los otros. 

Como un documental de Felix Rodriguez de la Fuente es fácil reconocerlos en su hábitat.

El Odolescente solo piensa en sí mismo y es imprevisible,

se pasa horas detrás de una pantalla,

o de un espejo retocándose el flequillo para poder pavonearse entre sus iguales.  

No se hace responsable de lo importante, se puede ver claramente en el estado de su cuarto o

, por el contrario, es tremendamente autoexigente, pudiendo sentir en el aire si alguien ha “invadido” su espacio. 

El Odolescente clásico tiene problemas para relacionarse con su entorno,

Algunos de buenos son tontos…

Otros son tan cerrados que podrían parecer mudos,

Pero los más fáciles de detectar son los que siempre quieren tener la razón, se hacen los incomprendidos, aprovechando para no hacerte caso y salirse siempre con la suya. 

Si es así, si te suena algo de lo que te estoy contando,

No lo dudes,

tienes un Odolescente en casa. 

Lo que no te estoy contando es que igual que todo Adolescente tiene una Madre…

Todo Odolescente una modre.

Nunca falla. 

• ¿En serio?

En serio.

• Pero si la gran mayoría de Odolescentes son así…

Exacto.

Lo que quiere decir que la gran mayoría de adultos con hijos son modres. 

Ser modre es tremendamente sencillo, solo hace falta parir al niño, o plantar la semillita, solo por eso te ganas el título de modre.  

No pretendo desmerecer por lo que una mujer pasa para dar a luz, faltaría más, pero la verdadera aventura empieza ahí.

Lo que va a determinar si eres una modre o una Madre será lo que hagas a partir de ese momento.

Ser Madre te lo tienes que ganar, es una decisión que requiere valentía, compromiso y formación.

 Por eso detrás de todo Odolescente se encuentran sus podres. 

Dos personas que decidieron tener un hijo con muchísima ilusión pero sin tener ni idea de cómo educarlo. 

Lo siento, pero no es suficiente con buena intención, no si te importa que tu hijo tenga éxito y sea feliz. 

Al principio, como era pequeño, no molestaba, pero ahora…

Tener un Odolescente suelto por casa es cuanto menos agotador. 

Mientras el Odolescente hace lo propio de su especie sus podres hacen lo que pueden para intentar reconducirlo.

Reconocerás enseguida a una modre cuando la veas interactuar con su Odolescente.

Verás cómo siempre sabe lo que le conviene a su hijo, lo que tiene que hacer y cómo tiene que hacerlo para que sea feliz, para que le vaya bien, para no equivocarse en la vida.

Obvio es experta en dar consejos que no lleva a la práctica. 

Verás cómo la modre cambia de color si el Odolescente no hace lo que le han dicho una decena de veces, quizás con la clara intención de que si lo dice más fuerte quizás, y solo quizás, obedezca. 

Por el contrario, hay otras modres que por miedo a molestarle, por miedo a que se enfade, por miedo a que se aleje aún más de lo que ya está, le permiten hacer lo que le plazca.

Otros Odolescentes siguen llevando pañales aunque los pelos de los huevos se asoman por las costuras. 

Verás cómo la modre improvisa constantemente, en función de lo que hace su Odolescente, movida por la de rabia,  el miedo o la culpa.

Verás cómo la modre, aún siendo consciente de que la situación no está bien, no busca ayuda, no lee, no se forma, porque se considera una buena madre, sin ser consciente de lo bien que puede llegar a estar. 

No juzgo a las modres, todo lo contrario, me consta que lo hacen lo mejor que saben y que pueden, 

Eso sí, aquellas modres que aún siendo conscientes de que pueden ayudar a su hijo siguen compadeciéndose sin tomar la iniciativa para cambiar la situación…

Esas que se jodan.

Saben que pueden pero no quieren. 

Me sabe mal por su hijo que será Odolescentes hasta que tengan a sus propios Odolescentes y quizás, solo entonces, decidan madurar. 

Por suerte para las modres que quieren cambiar, la Odolescencia tiene cura y no es la edad.

La única cura es ser la Madre que tu hijo se merece. 

Solo así conseguirás ayudarle, solo así conseguirás darle las herramientas para que sea feliz. 

Si quieres el paso a paso, puedo ayudarte.

Si no, sin problema, disfruta de tu Odolescente.

Al fin y al cabo es tuyo y tú decidiste tenerlo. 

Por mucho más.

Vicent.